Arabia Saudita ahogada por la caída del petróleo
Arabia Saudita está regresando al mercado de bonos. Planea recaudar u$s 27.000 millones antes de fin de año, en la señal más cruel hasta ahora de la presión que está generando la caída de los precios del petróleo sobre las finanzas del mayor exportador de petróleo.
Los bancos sostienen que el banco central del reino estuvo sondeando la demanda para una emisión cercana a 20.000 millones de riyales sauditas (u$s 5.300 millones) mensuales en bonos tramos a cinco, siete y 10 años en el año.
Fahad al-Mubarak, presidente de la Agencia Monetaria de Arabia Saudita, señaló en julio que Riyadh había ya emitido sus primeros u$s 4.000 millones en bonos locales, la primera colocación soberana desde 2007. Pero estos últimos planes representan una significativa ampliación de ese programa, que los banqueros creen que podría hasta extenderse a 2016, dado el panorama de los precios del petróleo.
El hecho de que Arabia Saudita recurra a un mayor endeudamiento local recalca los desafíos que enfrenta la mayor economía de la región en medio de las pronunciadas caídas que registró el precio del petróleo en las últimas décadas. El Brent, la referencia internacional, bajó de u$s 115 en junio del año pasado a cerca de u$s 50 esta semana.
El descenso del valor del crudo se aceleró en noviembre pasado cuando la OPEP, el cartel de productores, decidió no recortar la producción, un significativo alejamiento de su tradicional política de reducir la producción para impulsar las cotizaciones. Arabia Saudita aseguró que se trataba de un intento por defender la porción del mercado.
Pero la decisión de enfrentar un período sostenido de precios bajos generó una enorme tensión en las finanzas de los principales exportadores de crudo, incluyendo Arabia Saudita, que necesita el petróleo a u$s 105 el barril para equilibrar su presupuesto.