“Vamos a una reducción del déficit energético, pero llevará 15 años”

Teófilo Lacroze, nuevo presidente de Shell en la Argentina, retorno al país el 1° de junio después de pasar varios años liderando los proyectos de la compañía  anglo-holandesa en Brasil. Reemplazó a un directivo histórico del sector como Juan José Aranguren, que en más de 10 años al frente de la petrolera hizo gala de un estilo frontal y de defensa del marco regulatorio e institucional que le valió un extenso conflicto con el kirchnerismo.

Durante su presentación en sociedad, en el marco del Seminario “Energía para el desarrollo argentino”, que se realiza hoy en Neuquén, Lacroze retomó el tono directo que caracterizó a su antecesor al frente de Shell. “Vamos hacia una reducción del déficit energético, pero eso nos va a llevar más de 15 años. Tenemos que empezar cuanto antes y también ser pacientes, porque hará falta invertir mucho dinero. Se necesitarán alrededor de 25.000 millones por año, entre 12.000 y 15.000 millones para los yacimientos no convencionales de Vaca Muerta”, advirtió el directivo. “Para eso necesitamos garantizar la rentabilidad del negocio de exploración y producción de hidrocarburos”, agregó en el marco del evento organizado por la fundación DAR, que responde a José ‘Pepe’ Scioli.

A diferencia del resto de los oradores del seminario –como Fernando Giliberti (YPF), Marcos Bulgheroni (PAE), Carlos Ormachea (Tecpetrol) y Ricardo Livieres (ExxonMobil)-, Lacroze de introdujo de lleno en los cambios que deberá implementar el próximo gobierno si apunta a captar el interés de la industria internacional.

“Debemos contar con claridad y transparencia en el marco regulatorio. La seguridad jurídica es fundamental. Necesitamos un marco para los próximos 30 o 40 años, así como también estabilidad fiscal para el período. Se precisa además, incentivos fiscales para la inversión. Y libertad para girar utilidades. Cada empresa debe poder disponer del capital para operar libremente. Nuestra industria se desarrolla en el mundo y necesitamos tener fuerza y solidez institucional para que las inversiones se rediquen en el país”, detalló. “Hace falta más libre mercado si queremos competir con éxito con inversiones como las de EE.UU. y Canadá. En ese sentido, recuperar un único tipo de cambio es central”, concluyó.