FT: crece el optimismo entre los productores de petróleo
El Brent subió 15% desde que la OPEP acordó recortar la producción el mes pasado y 75% frente a enero, cuando el barril tocó su piso de los últimos doce años.
Mientras esta semana llegaban a Londres algunos de los máximos ejecutivos del sector petrolero mundial para asistir a una cumbre de la industria, el crudo Brent, su producto de referencia, cotizaba a u$s 52 el barril, exactamente lo mismo que el año pasado. Aunque no parece ser un motivo de festejo, después de la brutal racionalización desde que los precios se derrumbaron de su nivel superior a u$s 100 el barril a mediados de 2014, los picos en casi doce meses registrados en los últimos días se sumaron a la confianza de que lo peor ya pasó para los productores de petróleo.
«Estamos en el final de una considerable crisis,» dijo Khalid al-Falih, ministro de energía de Arabia Saudita y presidente del directorio de Saudi Aramco, la petrolera estatal, en la conferencia anual Oil & Money. «Los fundamentos están mejorando y el mercado se está reequilibrando».
Sus comentarios se repitieron en Londres entre ejecutivos, operadores e inversores de todo el sector, lo que refleja el constante aumento del optimismo desde que el mes pasado los miembros de la OPEP, el cartel de productores de petróleo encabezado por los sauditas, acordaron en forma provisoria un recorte de la producción. El Brent subió 15% en las últimas tres semanas y 75% desde el piso inferior de los últimos doce años en enero, de u$s 30 por barril.
Hubo tímidas señales de que un repunte estaría impulsando la inversión. Una firma exploratoria norteamericana llamada Extraction Oil & Gas la semana pasada recaudó u$s 644 millones mediante la oferta inicial de acciones más grande del sector energético desde el derrumbe del crudo. Mientras tanto, la cantidad de plataformas de perforación activas en el mundo ?un indicador de la exploración? se incrementó durante los últimos cuatro meses después de haber caído en la mayor parte del año anterior.
La recuperación es más clara en Estados Unidos, donde el número de plataformas subió un 25% desde mayo tras haber caído 75% desde 2014. La actividad está concentrada en las reservas de gas y petróleo shale que, debido a sus costos relativamente bajos y alta flexibilidad, se está reactivando más rápido que las fuentes convencionales.
Sin embargo, es demasiado pronto para declarar un resurgimiento general de la vitalidad en la industria de gas y petróleo. Tom Allacott, director de investigación corporativa en Wood Mackenzie, consultora de energía, sostiene que al congelamiento de la inversión de los últimos dos años llevará tiempo derretirlo más allá de la producción en tierra estadounidense. «El sector se está moviendo más allá de su supervivencia y está entrando en la etapa de recuperación. Pero las compañías todavía son cautelosas y tienen el foco puesto en la disciplina de capital y en el flujo de caja».
La escala de la contracción de la industria fue épica en sus proporciones. El gasto de capital en exploración y producción se redujo de casi de u$s 700 billones en 2014 a u$s 400 billones este año y, según Wood Mac, se cancelaron o postergaron trabajos de exploración y producción por u$s 1billón.
Los 2.700 millones de barriles de reservas nuevas descubiertas el año pasado representan la suma más baja en casi 70 años y una décima parte del promedio de largo plazo. Este año va camino a ser peor. El derrumbe llevó a algunos líderes del sector a advertir sobre faltantes de abastecimiento en los años siguientes, a menos que se afloje el freno a la inversión. Arabia Saudita sostiene que la acción propuesta por la OPEP de fijarle un piso a los precios ayudará a incentivar la perforación.
Wood Mac estima que para 2025 hay que desarrollar 20 millones de barriles diarios de nueva producción para satisfacer la creciente demanda, y reemplazar a los actuales yacimientos que están en descenso. «Se viene una contracción», dijo Paul Horsnell, director de investigación de commodities en Standard Chartered.
«Necesitamos una señal para el mercado de que se necesita más oferta». No todos comparten ese sentido de urgencia. Varios líderes del sector comentaron en la conferencia de Londres que la capacidad que tienen los productores norteamericanos de shale de reforzar la producción mantendrá un tope para los precios. Ryan Lacne, CEO de ConocoPhillips, señaló que eso significa que seguirá siendo difícil justificar las grandes inversiones en la exploración convencional. «Los días del gasto sin límites terminaron», comentó refiriéndose a la época de oro del petróleo.