Reservas de crudo de EEUU son las más altas en 80 años
Las crisis de la oferta y la demanda de la energía nunca terminarán. Son fruto del conflicto in-terminable de factores contrapuestos que a veces tienen períodos de estabilidad, con inevitables estallidos que desatan consecuencias buenas para unos y malas para otros.
La estrategia de Arabia Saudita y sus aliados del Golfo Pérsico de mantener la producción pe-trolera en su capacidad máxima, ahora lanza signos inequívocos de haber comenzado a hacer mella en los campos de altos costos, sobre todo en Estados Unidos, donde se utiliza la tecnología de la fracturación hidráulica de esquistos.
Distintas publicaciones especializadas revelan cómo el número de taladros en uso disminuye con rapidez. A finales de enero había 1262 plataformas de perforación en pleno funcionamiento en tierra firme de Estados Unidos, después de haber alcanzado el tope de 1551 en octubre pasado. Los pozos en perforación se redujeron 28 por ciento con respecto a junio pasado, a pesar de lo cual la cantidad de crudos extraído decreció en menor proporción (apenas 8 por ciento).
Ahora bien, esas cifras no son suficientes para formular previsiones exactas acerca de cuándo los precios repuntarán de manera sostenida, porque el volumen de producción total es elevado. Alemania y España muestran signos económicos alentadores que traerán mayor consumo de combustibles, pero todavía no se ha visto lo mismo en otros países europeos y tampoco se co-nocen las más recientes estadísticas chinas y japonesas. La sobreoferta de petróleo, según datos de la Agencia Internacional de Energía, es algo superior a 1.5 millones de barriles por día, lo que quiere decir que para volver a ver la cotización promedio por encima de 60 dólares por barril tal vez se requieran varios meses.
El criterio del ministro de petróleo de Kuwait, Ali al-Omar, está precisamente en esa línea, al pronosticar los 60 dólares para finales de año. Y una de las causas es que las reservas de crudos de la mayor economía del mundo, Estados Unidos, están ahora en el punto más alto de los últimos 80 años, al acercarse a 420 millones de barriles, y todo hace pensar que la disminución tomará meses.
ExxonMobil, Chevron, Shell, BP, Statoil, Pemex, Petrobras y otras petroleras, han anunciado disminuciones temporales en sus planes de exploración e inversión en más de 40 mil millones de dólares, lo que a su vez repercutirá en la extracción de crudos. No obstante, el desbalance entre la oferta y la demanda con respecto a anteriores situaciones similares, consiste en que ahora son mayores los elementos capaces de evitar el retorno a épocas de precios muy elevados por períodos prolongados. Uno de ellos es el fracking, que en poco tiempo pone en producción en ciertos campos.
De la misma manera, si bien el petróleo y el gas son determinantes en el desarrollo mundial, no se puede desestimar el crecimiento de las fuentes alternas de energía. Una idea de esto lo da, por ejemplo, el crecimiento de la industria fabricante de paneles solares, cuyas ventas totales en 2014 fueron de casi 6 mil millones de dólares, lo que representó 12 por ciento más que el año anterior. Y, claro, aunque eso dista mucho de ser una amenaza para los productores de petróleo sí es revelador del avance de las llamadas fuentes de energía limpia.
La industria automotriz utiliza cada vez motores de mayor eficiencia. Esto lo ilustra el hecho de que hace unos años nadie imaginara que Toyota vendería más de 10 millones de su modelo hí-brido Prius, y que otros competidores transitarían el mismo camino y hasta ensayen con el hi-drógeno como combustible. De la misma manera, ese monstruo de la tecnología que es Apple acaba de anunciar la construcción de una gran planta solar de 850 millones de dólares en su nuevo complejo de Cupertino, en California, para minimizar sus gastos, consumir energía no contaminante y obtener ingresos adicionales.
Los beneficios económicos de la industria de los hidrocarburos han sido, son y seguirán siendo altos por mucho tiempo, pero todo indica que en el futuro serán menores.
En febrero ExxonMobil reportó ganancias trimestrales de 6.570 millones de dólares y sus ingre-sos totales superaron los 87 mil millones de dólares. Las utilidades de Shell ascendieron a 4.200 millones y las de Chevron a 3.500 millones de dólares.

Datos de interés

La demanda mundial de petróleo se estima en el entorno de 90 millones de barriles por día. Los países miembros de la Opep aportan unos 30 millones de barriles por día, un 30% de la demanda global. Los países no miembros de la Opep tienen una producción cercana a los 60 millones de barriles por día.
Estados Unidos tiene una producción estimada de 13 millones de barriles por día. La reserva de crudos de Estados Unidos se calcula en 420 millones de barriles. Datos extraoficiales indican que la capacidad de almacenaje de petróleo en el mundo está co-pada y no existe mucho margen para que crezcan las reservas.